DESCRIPCIÓN:

El cliente está interesado en la compra de una parcela en un entorno natural junto al cauce de un río (suelo no urbano) que incluye una vivienda cuyas obras no han finalizado y quiere saber si la podrá adaptar a sus necesidades incluyendo la construcción de edificaciones anexas.

Tras analizar la información facilitada y revisar las normas urbanísticas del municipio se comprueba que existen disparidades entre los datos aportados por el vendedor y las ordenanzas municipales. Se realizan averiguaciones con el fin de conocer la realidad urbanística de la parcela, la legalidad de las obras ejecutadas y/o la existencia de expedientes disciplinarios.

Se informa al cliente que la parcela es un terreno no urbanizable protegido que impide la realización de cualquier tipo de obras, que la edificación existente es ilegal y que existe un expediente de demolición sobre ella.

UTILIDAD:

El cliente sabe que el terreno no se adapta a sus necesidades. Se ha evitado la compra de un terreno que no cumplía con las condiciones previstas por el comprador, que hubiera impedido la realización de cualquier tipo de obras e incluso la legalización de las existentes.

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